Ante la inminente pérdida de registro del Partido de la Revolución Democrática (PRD), revelada por los resultados de los cómputos distritales, la Comisión de Fiscalización del Instituto Nacional Electoral (INE) ha tomado medidas inmediatas. El INE designará un interventor encargado de supervisar y controlar el uso y destino de los recursos y bienes del partido, cuya aprobación será responsabilidad del consejo general del instituto.
La Unidad Técnica de Fiscalización del INE notificó al PRD que, al no alcanzar el 3 por ciento de la votación nacional, mínimo exigido por la Constitución, las prerrogativas y gastos del partido serán gestionados y autorizados por el interventor que el instituto apruebe. Esta intervención inicia un proceso de vigilancia estricto sobre los recursos y bienes del partido, anticipando una eventual liquidación.
Según la Ley General de Partidos Políticos, una vez que los cómputos distritales indican la falta de votos suficientes, el partido entra en una fase de prevención. Esta etapa comienza con los resultados distritales y se extiende hasta que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirme la pérdida de registro del PRD. Durante este período, el interventor ejercerá un control riguroso sobre los bienes y recursos del partido.
El artículo 95 de la Ley General de Partidos Políticos estipula que la Junta General Ejecutiva del INE emitirá la declaratoria de pérdida de registro una vez que el TEPJF valide la decisión después de las impugnaciones. El interventor tendrá amplias facultades para administrar y disponer de los bienes del partido, asegurando que todos los gastos sean previamente autorizados. No se podrán enajenar, gravar o donar bienes del partido sin la autorización del interventor.