En un veredicto histórico, Hunter Biden, hijo del presidente Joe Biden, ha sido declarado culpable de tres cargos de delito grave relacionados con la compra de un arma en 2018. Los cargos incluyen mentir en un formulario obligatorio de compra de armas al afirmar que no consumía drogas ilegalmente ni era adicto a ellas. El jurado encontró a Biden culpable de mentir a un vendedor de armas con licencia federal, hacer una declaración falsa en la solicitud y poseer ilegalmente un arma durante 11 días.
Hunter Biden, de 54 años, mantuvo una expresión impasible y miró fijamente al frente mientras se leía el veredicto. Posteriormente, dio unas palmadas en el hombro a su abogado en señal de agradecimiento. A pesar de enfrentar hasta 25 años de prisión, es poco probable que reciba la sentencia máxima, dado que los infractores primerizos raramente son castigados con la pena más severa. La jueza Maryellen Noreika, quien preside el caso, determinará su sentencia en una fecha aún por definir.
El caso se centra en una compra de armas realizada en 2018, durante la cual Hunter Biden declaró falsamente que no era consumidor ni adicto a las drogas, una afirmación que los fiscales demostraron ser falsa. Este veredicto llega en un año electoral significativo, marcado por múltiples procesos judiciales que involucran a figuras políticas prominentes. Además de Hunter Biden, el principal rival político de su padre, Donald Trump, también enfrenta cargos penales en tribunales federales.